
Estoy en Brasil con B. Más precisamente en Buzios. Una península que la llaman isla y en definitiva, de isla no tiene nada. Solo una apariencia, una brisa. El clima es sofocante, un calor como a presión, bien de trópico, con poco aire y pesado. Las playas son bonitas, pero están abarrotadas de gente. En temporada de verano es un sitio muy turístico donde no entra ni una sombrilla más. Una al lado de la otra. Sombrilla. Sombrilla y gente blanca, de mejillas sonrosadas, que se pone colorada con el sol. Buzios se divide en sectores geográficos que marcan la diferencia. En la entrada de Punta Rasa, podemos encontrar pocas posadas y gente venida a menos, con una playa muy ventosa y muy pocos hoteles. La ruta principal esta muy transitada por las combis que hacen el trayecto hacia el centro y demás playas y por los autobuses que son muy antiguos y hacen mucho ruido. La gente casi no va en bicicleta y camina poco. Todo el movimiento es a motor. Estamos en el Ariau hotel, en Bahía Formosa, no esta mal, tiene playa privada y una piscina que nos convence más allá de la ubicación. El desayuno es el típico brasilero: Mango, maracuyá, sandia, melón y demás frutas tropicales. En la entrada del hotel hay una estatua de un caballo que nos hace mucha gracia. Es curioso. No se que representa un caballo en el medio de la ruta. En fin. B esta más tranquilo. Tiene un plan deportivo para cada día. Plan que no se si podrá llevar a cabo. Bajamos al centro en la combi brasilera que nos cuesta dos reales y llegamos hasta la Playa de los Amores, luego caminamos por Ossos, y por el camino de la estatua de los pescadores en el mar y la de Brigitte Bardot. Hay una leyenda mito con Brigitte. Dicen que en los años sesenta se enamoro del sitio y se quedo a vivir por aquí una temporada. Los habitantes en su honor construyeron una estatua de bronce donde se puede ver a una Brigitte completamente dorada con su cabellera rubia, con aspecto despreocupado y delgadísima. Lo curioso de la leyenda urbana es que muchísimos bares rinden homenaje a su nombre y se llaman así: Bar Bardot. En definitiva no se que pensara Brigitte de la Saint Tropez Brasilera. Mito. Mitos y más mitos. Seguimos la ruta del día y terminamos en la playa de Joa Fernández. Preciosa pero con miles y miles que luchan por un trozo de arena. Nos vamos. Alquilamos un boggie descapotable gris que tiene motor de escarabajo y se llama “Baby”. Damos vuelta por toda la isla una y otra vez. Cuando cae la noche tenemos los brazos totalmente rojos por el descapotable y somos doradamente felices…
2 comentarios:
Hola, me pordrías indicar en que Hotel en Buzios o posada te alojaste? yo me quiero ir para comienzos de febrero.
Gracias
Turismo en Brasil
Si, se llama "Ariau Hotel" y
esta en el comienzo de Buzios.
Saludoss
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