21/1/09

La danza de la realidad


Me siento como un perro que se mete en la cama mientras su amo duerme y que de a poco va ocupando todo el espacio hasta que el amo despierta y quiere sacarlo o moverlo para poder dormir y volver a la posición que estaba y el perro insiste en que localizó su lugar y se aferra a el y se obsesiona con ese área y no quiere salir y comienza a gruñir y refunfuña de tal forma que el amo se aterroriza, duda, desconfía, intuye que no va a morderlo, pero en el fondo tiene miedo de que despierte su instinto animal y termine hincándole todos los dientes en el cuello y que al final se apodere de la cama.
Así me siento yo, como ese perro que manda a su amo. Como una esclava de su amo, pero en el fondo el amo no es nada sin su perro. Soy un perro (búfalo en el chino) y releo a Jodorowsky en la casa de mi amo, mi perro. Todo es muy curioso. Es un libro que B encontró en una playa de Levante en nuestra querida isla cuando aun nuestros destinos no se habían cruzado. Luego como dos aguas que corren por el mismo río, ahí estábamos, B y yo, cruzando nuestras vidas por la misma isla. Y unos años mas tarde ahí estaba yo en la carretera de Cala Sahona haciendo auto stop cuando un coche se detuvo por mí y me abrió sus puertas. Me senté detrás y alguien comenzó a hablarme. Su voz me sonó familiar. Al mirar por el espejo retrovisor, me quede de piedra: era el autor del libro que releo una y otra vez en la casa de B: “Si tiras una piedra hacia el infinito, esta caerá en tus manos”. “Todos los actos que hacemos tienen un eco el universo”. Y frases de ese tipo que me hacen mucha ilusión: Jodorowsky, B, Formentera y Yo por el mismo río de mi vida.
Continúo con el libro y voy encontrando rituales maravillosos, super potentes, compuestos de delirios que al final hacen un printing en el inconciente. Una marca sanadora. Cierro el libro y una luz invisible se vuelve a encender dentro de mí. En fin, estoy necesitada de fuerza, coraje, rituales y valentía para transitar estos últimos días junto a B en nuestra danza de la realidad…

13/1/09

Pronto


Europa esta nevada y America del Sur se carboniza. Es el comienzo de otro año. El 2009 ha llegado. En los noventa se veía tan lejano el año 2.000 y hoy en día las noticias del mundo nos siguen bombardeando familiarmente: Palestina-Gaza. La sangre inocente. Las armas blancas. La mafia llamada búlgara sigue en acción. Un jefe de la mafia colombiana muere acribillado en una habitación de hotel. Las carreteras están nevadas y los coches se estrellan. Los autobuses en Barcelona circulan con asombrosas propagandas ateas: “Posiblemente Dios no existe, deja de preocuparte” Penélope Cruz y Javier Bardem no ganan los premios “Golden Globe”. Cristiano Ronaldo es nombrado el mejor jugador del mundo por la “F.I.F.A World Player” y como ironía Messi se queda sin premio. Una alarma de incendio salta en un hotel de Manchester por que Diego Armando se fuma un puro plácidamente. Diego va a ver a Teves y este no juega ni diez minutos. B bebe cerveza. B mira documentales del FBI. B cocina verduras al vapor y usa mucha salsa de soja. B se cepilla el pelo como una niña. Yo armo mi maleta. Armo y desarmo. Desangro y sangro. Son dos maletas. Una de invierno. Otra de verano. Desangro y sangro. Dentro de poco me iré al verano. En pocos días otra vez abandonare esta ciudad y partir nunca fue fácil. Otra vez abandono una ciudad por otra y un amor por otro. El de B por el de mi familia. Miles de actores marchan por las calles nevadas de Madrid en repudio por los ataques de Israel. El mundo gira y el Facebook se pone de moda. Es el nuevo resucitador de muertos de la web. Estadísticamente, en España hay tres millones de gente en paro. Al Gran Wyoming se lo ve viejo y lento y a la chica que trabaja con el en el programa de la sexta, ya se le pasaron los quince minutos. B esta borracho, yo empiezo a morirme de asco y Lenny Kravitz canta: “My life is perfect”. Me voy muriendo de asco mansamente. Pruebo pensar en lo que pronto vendrá. Me imagino una colorida Buenos Aires, muchos árboles, el calor de la metrópoli, un mundo mejor, un amor más higiénico y todo el océano en primavera…

1/1/09

B R I N D O


Los últimos días del año han llegado. Brindo con una emoción dolorosa por los días grises que el año me ha robado. Brindo por lo que hice. Por lo malo. Por el dolor causado. Por el que me han causado los otros. Por los colores claros y los brillos. Por la luz del sol de Formentera. Por los atardeceres en el Sun Splash. Por mi amigo Vincent y sus estrellas. Por las bicicletas en el bosque girando. Por el encuentro. Por el desencuentro. Por el comienzo de una nueva vida con olor a rosa. Por las borracheras eternas. Por las luces de otro día. Por el malentendido. Por los causas perdidas. Por los marginados. Por los rebeldes sin causas. Por “El mal de la muerte”. Por Marguerite y sus escritos. Por los libros que me hicieron mal. Por el amor. Por los que me ayudan a vivir. Por los que me ayudan a morir. Por mi amiga Violeta y su felicidad en la Patagonia. Por la libertad primera y última. Por mis amigos que no están pero siguen aquí. Por Shadows, Love forever dondequiera que estés. Brindo por Marciano Backman y nuestra pequeña imaginaria Margoux. Por sus padres delirantes durmiendo en el Raska. Brindo por el mar. Por el mar. Por el mar. Por el mar. Por el mar. Por el mar de amor. Por el mal del amor. Por Santos Lugares. Por el Poble Sec. Por la montaña del Montjuic. Brindo por seguir insistiendo. Por el intento. Por el fracaso de las relaciones humanas. Por el fin del mundo. Por Angels en Berlín tomándose una copa en algún bar sin nombre. Por los puentes imaginarios y mis hermanos. Por todos lo que me quieren de aquí a la eternidad, por mis enemigos: Brindo. Por los cualquiera. Por el borracho de la plaza. Por el verde del cielo. El azul de los bosques. Por las piezas inconclusas. Por los perros. Por las pajas mentales. Por la resistencia. Por ver cine en la cama. Por mi padre. Por la cama. Por el amor por todas partes. Por mi futura hija. Por lo que tuve y perdí. Por el encuentro. Por el tesoro. Por los que buscan. Por bailar borracha. Por lo desconocido. Por el miedo. Por los viajes. Por la incongruencia. Por B y V. Por mi madre, mi gran madre. Por la tonterías. Por mi abuelo en alguna estrella. Por Lena y Yako. Por el tiempo que queda. Por el: sexo, la eternidad, los caprichos ciegos, el desengaño, los cuerpos, el llanto, las noches que gritan, el llanto.
Por el honor de estar vivos. Por el placer de estar vivos. Por el dolor de estar vivos: BRINDO.